Se exige a las tabacaleras que paguen por los daños causados

Organizaciones levantan la voz, mientras países como Palau actúan con soluciones educativas ambientales

Nota por: aDiarioCR.com

¿Se imagina que cada turista que ingrese a Costa Rica solicite a sus visitantes firmar un compromiso de pasaporte para actuar de manera ecológica y culturalmente responsable?

Esto ya lo hace la República de Palau, un archipiélago de Oceanía, cerca de Filipinas e Indonesia, por el bien de sus niños y las futuras generaciones de palauanos.

Palau se distingue por tener una de las mejores calidades de vida en la región de la Micronesia y es la primera nación en cambiar sus leyes de inmigración con enfoque de protección ambiental, según informó en la Conferencia de las Partes COP10 en Panamá, Candance Koshiba, la directora de proyecto del Ministerio de Salud de Palau.

Palau fue el primer país en aprobar oficialmente el Tratado de Alta Mar de las Naciones Unidas (ONU) en enero pasado y se comprometió a que no se tiren colillas de cigarrillos en ningún lugar de la isla para no contaminar tierras ni mares, según explicó Koshiba.

Que paguen quienes dañan el ambiente y la salud

Los países reunidos en la COP10 acordaron un proyecto de decisión que fortalece la capacidad de las naciones para responsabilizar y exigir cuentas a las corporaciones tabacaleras por su impacto devastador en las personas y el planeta.

La decisión estipula:

Fortalecer el Artículo 19 del Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCT), una herramienta poderosa pero poco utilizada que las partes pueden emplear para recuperar miles de millones en costos de atención médica y ambientales causados por la industria tabacalera.

Establecer un grupo de expertos para revisar las prácticas de responsabilidad que han adoptado partes como Brasil y Canadá, y proporcionar recomendaciones para fortalecer la responsabilidad penal y civil, incluidas medidas administrativas.

Recomendar a las partes asegurarse de que su trabajo en otros foros internacionales, como los tratados sobre el clima y el plástico, se fortalezcan en lugar de socavar el control del tabaco y la responsabilidad de la industria.

La decisión debería ser formalmente adoptada al final de las negociaciones este sábado.

Para Daniel Dorado, de la ONG Corporate Accountability:

Cuando alguien viola nuestra salud o seguridad, ya sea como individuo o como empresa, debemos exigirle responsabilidades. Sin embargo, durante demasiado tiempo, las empresas tabacaleras han matado, enfermado y contaminado a nuestras comunidades con impunidad. Ahora la comunidad internacional debe responsabilizarlos por sus daños pasados y, al hacerlo, ayudar a evitar que las generaciones futuras sufran a manos de las grandes tabacaleras.